Hace exactamente una semanita acabó oficialmente el verano para mi, adiós a playa, piscinas, rayos de sol, sundaes de chocolate con extra (y sin cacahuete), palas, noches de terracita y sandalias, bikinis y demás para el cajón!
Como sabéis, en verano tenemos que tener mucho cuidado con el cabello, ya que el sol, la salitre y el cloro hacen que se nos reseque un montón. Siempre recomiendan tirar de mil productos, ya sea sérum, mascarillas, acondicionadores, sprays.. lo que sea para tenerlo super hidratado durante esa época, y aún así, se estropea.
Así es que nada más volver, y aprovechando una tarde de domingo, lo primero que hice fue dedicarme un ratito a mi misma y tirar de un remedio casero que me había recomendado una amiga.
Para ello sólo necesitas:
- 1 o dos yemas de huevo (dependiendo según la longitud del cabello)
- una cuchara de aceite de oliva
- una cucharada de vinagre *
* este tercer elemento es opcional, yo fue el que utilicé y me fue muy, muy bien, pero hay miles de variantes que podéis encontrar en google, o incluso, utilizar sólo los dos primeros! Es cuestión de ir probando lo que mejor va con cada uno.
Lo mezcláis en un recipiente y os lo untáis por todo el cabello seco (en el caso de tener el pelo muy graso intentar aplicar la mezcla sin tocar la raíz) cubriéndolo con un envoltorio plástico de 20 a 40 minutos aproximadamente.
Después se lava el pelo con el champú y acondicionador que utilicéis y listo!